Janet Alfaro, defensora de la Reserva de Flora y Fauna Tariquía, ha denunciado la firma de contratos entre el Gobierno boliviano y empresas como Petrobras para la explotación de recursos naturales en la región, sin la consulta ni el consentimiento de las comunidades locales ni del pueblo boliviano en general.
Criticó duramente la actitud del Gobierno, acusándolo de actuar de forma unilateral y sin considerar el impacto ambiental y social que estas actividades podrían generar. «En ningún momento el pueblo tarijeño y boliviano ha decidido firmar esos contratos con Domo Oso X3, San Telmo y Astillero», afirmó, recalcando que estos acuerdos se han realizado sin el conocimiento ni la aprobación de las comunidades afectadas.
La activista sostiene que el Gobierno se comporta como si fuera el dueño absoluto de los recursos naturales del país, como el gas, el oro y la plata, y por lo tanto, actuó a su antojo al firmar estos contratos con Petrobras. «Esto se ha dado generalmente porque el Gobierno se cree dueño de los recursos naturales como el gas, el oro y la plata, por lo que ellos decidieron firmar contrato con Petrobras a pedido», añadió.
Por otro lado, Alfaro también denunció que estos contratos fueron aprobados por la bancada del Movimiento al Socialismo (MAS) en la Asamblea Legislativa Departamental sin consultar a la población. «Estos contratos fueron firmados con la bancada del MAS, en ningún momento se ha preguntado a la comunidad ni al pueblo tarijeño si está de acuerdo», enfatizó.