La realidad de la escasez de dólares en Bolivia ya no es solo un rumor o discurso político, sino una situación concreta que afecta al sistema financiero del país. Los bancos han dejado de vender dólares y no están dispuestos a abrir nuevas cuentas en esta moneda. En el mercado informal, la situación es similar. En Tarija, aproximadamente el 50% de las casas de cambio no tienen dólares, y las pocas que los ofrecen tienen tasas de cambio elevadas, con precios de venta de 10,50 bolivianos y de compra de 10,12 bolivianos.

La escasez de la divisa americana ha sido confirmada por El País tras visitar varias entidades financieras en Tarija, como el Banco Unión, Banco Nacional de Bolivia, Mercantil Santa Cruz y Banco Económico. Todas estas entidades admitieron que no cuentan con dólares disponibles. Además, ninguna de ellas permite realizar transacciones digitales en dólares, restringiendo los movimientos a aquellos clientes que ya poseen cuentas en dicha moneda.
Las compras en línea también se han visto limitadas a un máximo de 100 dólares cada 15 días en todos los bancos, sin posibilidad de realizar pagos o transferencias en dólares. Esta restricción es parte de una disposición nacional emitida por la oficina central. En el mercado informal, la mitad de las casas de cambio en el centro de la ciudad tampoco tiene dólares para vender, y las que sí tienen ofrecen tasas de cambio fluctuantes entre 10,18 y 10,50 bolivianos para la venta, y entre 10,08 y 10,12 bolivianos para la compra.
Un librecambista local explicó que para abastecerse de dólares, muchos recurren a comprar la divisa en Argentina, donde la relación cambiaria les resulta más favorable, a unos 7 bolivianos por dólar. Este método les permite vender los dólares en Tarija a precios ajustados según la demanda local.
El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, destacó que la escasez de dólares es un problema que persiste desde hace un año y medio, sin que el Gobierno haya logrado regularizar la situación. Esto ha afectado a todo el sistema financiero y a la población en general, que enfrenta dificultades para retirar dólares de los bancos. Romero señaló que los costos adicionales en el mercado paralelo han contribuido a una inflación acumulada del 2,49% en el primer semestre de 2024, superando la inflación del año anterior. Según Romero, los bancos están incumpliendo la ley al no permitir retiros completos en la moneda original y priorizar a grandes clientes sobre los pequeños usuarios, lo que agrava la escasez y eleva el tipo de cambio paralelo.